Tras el operativo se detuvo a 18 sospechosos y se secuestró droga. Se habían instalado a la vera del río Matanza, a la altura de Gregorio Laferrere, a fuerza de amenazas, balazos y hasta, se sospecha, asesinatos.
Una vez ganado el territorio, montaron una compleja estructura para controlar el lugar y dedicarse, sin problemas, a la venta de droga al menudeo. Tenían cuatro búnkers.
Nadie podía llegar a la zona sin someterse a un estricto sistema de seguridad interno: se registraban las patentes de los autos que pasaban y hasta se revisaba a todos los consumidores que iban a comprar estupefacientes, para evitar un ataque de un grupo enemigo.
Además, para cruzar de un lado del río al otro y tener un rápida vía de escape, habían instalado un sistema de tirolesa. Eran los dueños de la zona y los vecinos estaban atemorizados.
Según fuentes judiciales, Kiko y Corea, dos de los sindicados narcos que tenían a su cargo el manejo de los denominados «soldaditos», grabaron un video intimidatorio para difundirlo por Whatsapp a las bandas rivales.
En las imágenes se observa a cuatro sujetos arrodillados y se escucha la voz de un hombre, cuyo rostro no se ve, que dice: «Tengo una pistola, un 45 [por el arma] y no sé si gasto balas o no. La situación es así: vos amenazás a mi familia, pelotudo, pero mi familia está en Paraguay. Pedazo de gil. La próxima que te encuentro te mato».
Sin embargo, a pesar del poderío que supo ganar, la peligrosa banda fue desbaratada en las últimas horas. Tras una investigación del fiscal federal Santiago Marquevich y de detectives de la policía de la Provincia de Buenos Aires, 18 sospechosos fueron detenidos, la mayoría de nacionalidad paraguaya.
En los procedimientos se secuestraron 50 mil microdosis de LSD con la imagen de una esvástica, entre otras drogas. La investigación comenzó a partir de una denuncia de vecinos atemorizados.
«Era una banda con un gran poder de acción que se amparaba en lo inhóspito del lugar. Contaban con postas de seguridad para detectar a la policía y con varias vías de escape», dijo uno de los investigadores.
El sistema de tirolesa que habían instalado como vía de escapeEl sistema de tirolesa que habían instalado como vía de escape
Durante los procedimientos, realizados en Laferrere, González Catán y Virrey del Pino, en el partido de La Matanza, hubo un intercambio de disparos entre la policía y los presuntos narcos. El tiroteo terminó sin que se registraran heridos.
«Además de comercializar LSD, también vendían paco y marihuana. No solamente en el río. También abastecían a varios barrios de la zona», sostuvo uno de los jefes policiales que participó de los operativos.
Además del LSD, la policía secuestró centenares de baguyos de marihuana, 600 dosis de paco, frascos de ketamina y precursores químicos.
En las próximas horas, los sospechosos serán indagados por el juez federal de Morón Jorge Rodríguez.
Según fuentes judiciales, además de la causa llevada adelante por el fiscal Marquevich, la Unidad Fiscal Temática de Homicidios Dolosos de La Matanza investiga una serie de asesinatos ocurridos en la zona.
«Era una banda muy violenta. En el río Matanza se encontraron cadáveres y ahora se están investigando esos homicidios», dijo una fuente judicial.