Una banda dedicada a la sustracción de combustible a partir de conexiones clandestinas a oleoductos y provocar estafas por más de 50 millones de pesos fue desbaratada tras varios allanamientos realizados por la Policía de la Provincia de Buenos Aires en el Conurbano y en el sur del país. Además, se secuestraron tres camiones de última generación con equipos cisternas para el traslado del crudo.

Los procedimientos estuvieron a cargo de la DDI Zárate Campana, tras una investigación iniciada en noviembre del año pasado tras una denuncia que indicaba “niveles de presión anormales en el oleoducto” que va desde la localidad de Brandsen a Campana, lo que hacía sospechar que se pudiera estar interfiriendo el circuito con alguna “pinchadura”.

Los efectivos recorrieron todo el tramo de la ruta provincial 6, entre las mencionadas ciudades, hasta que a la altura del km 175, en cercanías a la localidad de Capilla del Señor, observaron movimientos extraños dentro de un campo.

Tras un allanamiento se descubrió en el interior de un galpón de grandes dimensiones una conexión de reducción realizada al caño principal tipo by pas, que culminaba en el interior del predio para disimular la maniobra.

“Habían realizado un trabajo de ingeniería con precisión, con equipo integrados por mangueras de alta presión, válvulas y manómetros que permitían el “ordeñe” del oleoducto cuando fluía a alta presión el crudo”, dijo uno de los investigadores.

En la continuidad de la pesquisa hubo múltiples allanamientos que permitieron detener al jefe de la organización, de 45 años, en la localidad de Monte Grande, partido de Esteban Echeverría mientras que en San Vicente se apresó a otro integrante de 50.

En un galpón de Lanús se detuvo a cuatro hombres, de 46, 45, 22 y 60 años, lugar donde además se incautaron unidades utilizadas en el transporte del combustible.

En tanto, en un operativo realizado en Cutral Co, provincia de Neuquén, cayó otro de los responsables, de 33 años.

Luego de continuar la investigación se contabilizaron siete petroleras o refinerías de renombre, cuatro empresas de transportes y catorce domicilios particulares, entre ellos cuatro de la provincia de Neuquén y dos de Rio Negro, además de un estudio contable, que tenían todos relación directa en las maniobras ilícitas.

Interviene la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio de Exaltación de la Cruz, dependiente del departamento Judicial Zárate Campana.