El área de Delitos y Crimen Organizados de la Policía Metropolitana llevó a cabo la “Operación Checoslovaquia”, que constó de cuatro allanamientos en los barrios porteños de Caballito, Villa Luro y San Cristóbal; y simultáneamente en un domicilio de la localidad de La Tablada.

Durante los procedimientos se detuvo a tres integrantes de una organización criminal dedicada al tráfico de estupefacientes. Además, se secuestraron más de 60 kg de marihuana, 1000 dósis de LSD, cocaína fraccionada, armas, municiones, equipos de comunicación tipo handy (utilizados para intentar interferir frecuencias policiales), teléfonos celulares, notebooks y documentación relacionada con la causa.

La investigación derivó de otra, inicial, en la cual se estaba investigando una organización dedicada a la falsificación de documentos. Al realizar una serie de entrecruzamiento de datos, proveniente de seguimientos y escuchas telefónicas, las brigadas detectaron que se estaban efectuando operaciones relacionadas con la venta y compra de drogas, en principio marihuana. Por este motivo, se armó un nuevo sumario que fue elevado a la Justicia. Una vez analizadas las pruebas, el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°7, a cargo del Dr. Sebastián Casanello, ordenó que se profundicen las tareas investigativas respecto de este delito que es penado por la Ley 23.737 del Código Penal.

A partir de los indicios, las brigadas antinarcóticos comenzaron a realizar seguimientos, filmaciones y escuchas telefónicas puntales que le permitieron obtener gran cantidad de información relacionada con la causa. Al analizar estos datos, se comprobó la existencia de una organización criminal liderada por un ciudadano de nacionalidad argentina, de 34 años, que establecía conexiones con un traficante de drogas sintéticas de nacionalidad colombiana de 29 años.

Cuando debían concretar “operaciones” de tráfico de drogas se manejaban con dos códigos: “viajo a Europa del este”, cuando el intercambio se llevaba a cabo en un hotel ubicado sobre la Avenida Pedro Goyena ó “viajo a Checoslovaquia” haciendo referencia a una casa ubicada en Villa Luro sobre una calle con ese nombre. Luego, la droga era vendida principalmente en el barrio Floresta. La comercialización estaba a cargo de una mujer de 68 que oficiaba de dealer y la apodaban “La Doña”.

Los allanamientos fueron ordenados para esta fecha, ya que durante la última etapa de la investigación las brigadas habían comprobado que “El Colombiano” se había contactado con “El Líder” para pactar una entrega de drogas sintéticas que ingresaría al país desde Colombia.

Finalmente, la Justicia ordenó que los detenidos sean trasladados a la Unidad Penitenciaria Federal N°28 en calidad de incomunicados para ser indagados por el juez interviniente.

Por su parte, el Jefe de Policía Metropolitana, Horacio Alberto Giménez, destacó el gran trabajo llevado a cabo por el área de Delitos y Crimen Organizado para desbaratar esta organización Criminal. Además, remarcó que es “muy importante el trabajo que esta fuerza lleva a cabo conjuntamente con los juzgados federales”.