Sergio Navarrete había ido hasta la escuela de sus hijos como una tarde cualquiera. Antes de llegar a la puerta del colegio Santa María de los Angeles, estacionó su Fiat 125 y caminó hasta el establecimiento, en 81 entre 8 y 9.
Según confirmaron fuentes policiales a INFOPOLICIALES el hecho se produjo cuando el ruido de dos motos comenzaron a hacerse sentir en 9 entre 81 y 82, momentos despues un disparo alerto a todos los presentes.
En una iba Beatriz Recalde (31), la mamá de un nene de primer grado, y en la otra, tres ladrones con camperones holgados en los que escondían por lo menos un arma.
La mujer estaba por bajarse también para esperar a su hijo. Los delincuentes la vieron y se le abalanzaron para robarle su Honda Wave roja.
Había visto que la seguían y, ni bien se dio cuenta de que le apuntaban con una pistola, empezó a pedir auxilio. A la vuelta de la esquina y, a unos 15 metros de distancia, Sergio Navarrete oyó los alaridos y fue a ver qué pasaba. Ahí se dio cuenta de que a la que le apuntaban era la mamá de un compañerito de su nene más chico.